LA VICTORIA FUE PARA EL UNICO QUE LA PRETENDIÓ
El fútbol se impuso a la dureza. Los holandeses se olvidaron del partido y fueron a por los españoles. La estrategia oranje consistió en cortar el juego hispano a base de constantes y duras entradas. Los nuestros, con Del Bosque a la cabeza pidiendo tranquilidad constantemente, consiguieron escabullirse del juego holandés que les atrapó por instantes y ganar el partido.
España dominó con claridad el primer cuarto de hora y, de hecho, dispuso de dos buenas oportunidades para inaugurar el electrónico del Soccer City. Holanda no dominó en ningún momento aunque sí asustó. Van Marwijk colocó en el centro del campo a Van Bommel y De Jong con una única misión: Dar cera. Este último mereció coger vacaciones anticipadas tras una dura entrada con la plancha al pecho de Xabi Alonso.
Para colmo, Howard Webb colaboró con el juego marrullero de Holanda. Tras advertir cuando debió amonestar, España sin apenas haber soplado a los tulipanes, se encontró con dos tarjetas amarillas. Según avanzaba el choque, Holanda consiguió su objetivo: Sacar a España del partido. La dureza holandesa había intimidado a los internacionales españoles.
Sólo cabe destacar la actuación sublime de Robben ante el que Capdevila necesitó la ayuda de Xabi Alonso primero y luego de Busquets para frenarle. Sus dos mano a mano ante Casillas, le atormentarán durante muchas noches.
España se sacude a Holanda
Holanda tenía el partido donde quería pero no supo inquietar más que con las ya mencionadas jugadas de Robben. A falta de Xavi, el genio de Fuentealbilla decidió coger la manija. Desde la posición de mediapunta revolucionó la final. Además, la entrada de Navas fue el ingrediente perfecto para la cocción holandesa. El sevillista llevó mucho peligro por su banda e hizo sufrir en más de una ocasión a un Gio que tuvo que ser sustituido.
Villa y Xavi estuvieron deslucidos en la final. El reflejo es el constante derroche de unos tiros libres en los que la consigna es clara: Romper no colocar. El asturiano dejó su sitio a Torres el último cuarto de hora. Pero no iba a ser él el revulsivo.
Durante la prórroga, hubo dos hombres que quisieron devolverle el favor a Robben. Primero Robben marró dos oportunidades ante Casillas. Pues bien, primero Cesc a Iniesta y luego viceversa culminaron ante el meta holandés pero las dos ocasiones se fueron al limbo.
Pero el genio del Barcelona se cansó de esperar. Tras la ya más que merecida expulsión de un holandés, Heitinga, Holanda fue descaradamente en busca de los lanzamientos penales. Pero no lo consiguió. Un contraataque entre Navas, Torres y el pase de Cesc a Iniesta para que este fusile de disparo cruzado a Stekelenburg acabaron con los de Van Marwijk.
Pues sí, se impuso el fútbol. Por mucho que los holandeses no lo acepten y la paguen con el árbitro y su entrenador rechaza la medalla de subcampeón, el primer mundial de España en un hecho. Este país se lo merecía y debió llegar sin necesidad del tiempo extra. La historia le seguirá debiendo una a una Holanda que empañó la buena imagen desplegada por la naranja mecánica. A disfrutarlo. ¡Enhorabuena campeones!
KEVIN FERNANDEZ
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