EL REY LEON ACUDE AL RESCATE DE LA MANADA
El ariete rojiblanco saca a España del atolladero con un gol poco común en él · España se autocomplicó la vida con el 0-2 y tuvo que remar más de la cuenta · Villa iguala a Raúl como máximo artillero de la Roja
Pocas veces un sustantivo ha estado tan ligado a una persona como oportunista a Fernando Llorente. El delantero riojano exprime cada minuto con la camiseta de la Roja al máximo, hasta llegar a tener mejor coeficiente goleador con la Roja que Villa o el mismísimo Raúl. No fue un tanto de cabeza, como tan acostumbrados nos tiene, sino con el pie y empujando un certero centro desde la izquierda de Capdevila. Un gol que sirvió para sacar a España del barullo en el que se sumió.
Con el 0-2 y medio partido en el bolsillo, el equipo que dirige Del Bosque estuvo a punto de hacerse el “harakiri”. La relajación es la principal explicación a tal derrumbamiento, pero un amplio porcentaje del dicho fenómeno también lo tuvo el rival, Escocia. Esa selección que ocupa el puesto número 47 en el ránking FIFA y que a punto estuvo de darle un disgusto a quién lidera dicho ránking.
Craig Levein tomó nota de la reprimenda sufrida en estos últimos días por la prensa local, y abandonó el arcaico sistema defensivo empleado ante la República Checa para darle la responsabilidad ofensiva a Miller. El escocés fue uno, pero en los primeros compases dio guerra por tres. Aguerrido, peleón y con mucha motivación en los primeros compases, como el resto del plantel británico, hasta que España decidió cerrar el grifo.
La Roja empezó su recital de toqueteo del cuero, añadiendo el recurso de las bandas, hasta esperar un gol que debía caer por sí solo. Precisamente una jugada en el lateral originó el primer y único tanto de la primera parte. Un disparo de Ramos en el área fue cortado por la mano de Whittaker que vio, con la tarjeta amarilla incluida, como Villa igualaba a Raúl con un penalti que dudo si entrar o no.
ACCION, REACCION, REPERCUSIÓN
El regreso de los vestuarios fue un calco del inicio del primer período. Escocia salió mordiendo e intentando meter el miedo en el cuerpo de España, que consiguió sacudirse a su rival con un gol de Iniesta fruto de la generosidad de Villa. El asturiano cedió a Cazorla que, sólo en el área, disparó contra McGregor, cayéndole el rechace al de Fuentealbilla.
Escocia, lejos de entregar la cuchara, puso de nuevo las tablas en el electrónico cuando el gol de Iniesta aún coleaba en el Hampden Park. Naismith y Piqué, en un desafortunado lance, en propia meta igualaron el choque 11 minutos después de que el manchego lograse el 0-2. Pudo ser peor si Escocia hubiese aprovechado el momento de duda que atravesó la campeona del mundo pero su escaso fútbol fue un lastre demasiado pesado.
LA TORRE QUE ELEVA A LOS BAJITOS
Fue ahí cuando Don Vicente decidió mover el banquillo dando entrada a Pablo Hernández y Llorente. El extremo che dió frescura al equipo durante sus primeros cinco minutos en el césped, hasta que se dilucidó. El riojano, por su parte, llegó sin hacer ruido e hizo gritar a España con un gol que nos acerca aún más a la eurocopa de 2012.
Tres partidos y tres victorias. Lituania y Escocia ya quedan a 5 puntos en la lejanía. La República Checa, a sólo 3 puntos, parece nuestro rival más inmediato en el camino hacia Ucrania y Polonia aunque con Llorente, podemos estar seguros.
KEVIN FERNANDEZ
