La apisonadora alemana aniquiló a una inofensiva Argentina víctima del planteamiento desmesurado de su entrenador – La Mannschaft fue superior a la albiceleste prácticamente todo el choque.
Maradona mató a Argentina. Esa frase es la que mejor resume lo acontecido en este choque de cuartos de final. No hubo venganza por parte de la albiceleste, y sí humillación por parte bávara. El pelusa decidió sacar de inicio a cinco hombres de ataque, dejando sólo en el centro del campo a Mascherano. El chico como es natural acabó desbordado.
Cierto es que Alemania sorprendió desde el inicio, saliendo con mucho ímpetu y sin dejar a los sudamericanos entrar en el partido. Poco tardaría el cuadro de Joachim Löw en adelantarse, fruto de una falta que bota Schweinsteiger a la cabeza de un, incompresiblemente, desmarcado Müller. Romero sólo pudo sacar el balón de la red tras su colaboración en el gol.
Argentina no se llegó a encontrar y cada vez estaba más adormecida. Sus hombres de ataque no lograban hilvanar una jugada, y sólo algún lance aislado de Messi aceleró las pulsaciones de Neuer. Otamendi demostró sus carencias en una posición de lateral diestro que no es la suya, y fue desnudado constantemente por un inconmensurable Podolski que encontró petróleo en esa banda. Müller, que no jugará ante España porque cumple ciclo de tarjetas, fue la pareja de baile perfecta de este, ante un Özil que ayer apenas participó.
Según arraigaba el intermedio, los hombres de Löw decidieron bajar las revoluciones y ceder la posesión a sus rivales. Buena estrategia si hubiesen aprovechado sus ocasiones al contragolpe. No fue así, y la mejor noticia para Argentina al descanso fue ir perdiendo sólo por un gol.
Tras la arenga de El Pelusa en el descanso, sus hombres salieron a por todas encabezados por un gran Messi, que finalmente se fue de vació de este mundial, y un participativo Di María. Cuando parecía que la albiceleste saboreaba las tablas, una buena internada en el área de Podolski que culmina Klose en posible fuera de juego, mató las esperanzas de los pupilos de Maradona.
La entrada de Pastore hizo un amago de cambio de rumbo en el partido, pero el central Friedrich se encargó de que esto no fuese así con un gol en forma de sentencia tras un jugadón en el área de su compañero Schweinsteiger. Punto y final. La tardía entrada del Kun Agüero no evitó el doblete de Klose tras un contraataque al estilo alemán. El delantero del Bayern está a un gol de Ronaldo en su carrera hacia el pichichi histórico de la copa del mundo.
Maradona murió con sus hombres, pero a la vez demostró sus escasos conocimientos tácticos. ¿Tendrá fuerzas para seguir al frente? Alemania practicó el mejor fútbol que se ha visto en este mundial y fue justo vencedor. Ahora buscarán ante España la revancha de la Eurocopa.
La frase:
Diego Armando Maradona: “No tengo fuerzas para nada”
KEVIN FERNANDEZ
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